Desde su fundación, Ibiza-Eivissa ha sido una isla muy deseada, fenicios, romanos, árabes, en la etapa islámica conocida como Madina Yabisa, dejaron un amplio legado cultural, además, los valores naturales de la isla conforman una combinación perfecta, que ha consolidado a este enclave de gran biodiversidad, como referente del Mediterráneo.
Ibiza no sólo es ocio y diversión, calas con arena blanca, aguas turquesas, espacios rurales para disfrutar de la naturaleza, con vistas imperdibles a la costa y muy cerca de la isla de Formentera, a 30 minutos en ferry.
Una de las playas sobresalientes en Ibiza es Cala D’hort, espiritual quizás, desde allí se pueden ver los islotes Es Vedrá y Es Vedranell, asegurándonos unos atardeceres únicos.
Otro paraíso en playa ibicenca es Cala Saladeta, rodeada de pinares, incluso dentro del mar, y a la que hay acceder a través de un pequeño sendero, detrás de unas rocas.
También en Ibiza, hay pueblos con encanto, de casas encaladas, con cascos urbanos antiguos, combinados con plantas, dejando espacios públicos, para mercadillos de productos artesanales y locales, muestra de los talleres alfareros existentes en la isla.
Las pequeñas iglesias blancas que hicieron a la vez, función de refugio durante todas las invasiones y ataques piratas, son otras construcciones típicas de Ibiza.
Deteniéndonos en la ciudad destaca el barrio y conjunto monumental Dalt Vila, ubicado en la zona más alta, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1999, un punto esquinado rebosante de historia, rodeado de murallas, plaza de artillería con potentes cañones del s. XVIII, callejones empedrados, todo ello, adornado con vegetación mediterránea, dando colorido al conjunto.
La Torre del Homenaje es la torre más alta del recinto, divisándose desde allí el paso marítimo de Els Freus y Formentera.
La fiesta de Eivissa medieval celebra la designación de Dalt Vila, por la Unesco, como Patrimonio de la Humanidad, recobrando el núcleo histórico la vida de época medieval.
Decir Ibiza, es unir la isla con el comercio histórico de la sal, un comercio de tipo marítimo desde la Edad Media, algunas de las ciudades que se abastecían eran Génova, Nápoles o Sicilia; Actualmente los estanques de sal en Ibiza forman parte de un parque natural, las playas de Es Codolar, Es Cavallet y Ses Salines y el asentamiento fenicio de Sa Caleta (VII a.C.).
Las actividades acuáticas son otro atractivo en Ibiza, navegar a vela, submarinismo, travesías en kayak, surf, son algunas de las prácticas a realizar en el mar.
Ibiza puede ofrecer sensaciones, vibraciones únicas, sólo hay que dejarse conquistar por una isla, que siempre ha reinado en uno de los mares, claves para la Historia.
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VIAJAR CON ROSANA 
precioso! son tan bonitas las Baleares… 😍😍😍😍👏🏻👏🏻
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